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Un sueño singular

Publicado por Betina Ganim

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Para mi trabajo de Cartel, ubiqué mi rasgo: «Cuerpo, culpa y superyó».

Para ello partiré de una viñeta clínica extraída del Seminario 6 de Lacan, El Deseo y su interpretación; en particular de una serie de clases en las que Jacques Lacan aborda un caso clínico de la psicoanalista inglesa Ella Sharpe, y de “un sueño singular” que esta analista toma como elemento central de una sesión.

A partir de esta viñeta clínica que desprendo del texto de Ella Sharpe , intentaré cernir a partir de la vergüenza asociada a un recuerdo que deviene luego del relato del sueño, la singular relación entre el cuerpo, la vergüenza, la culpa, y el superyó, que se desprende de este material clínico.

Tengo que decir que si introduzco el elemento “vergüenza” en este recorrido, es porque hay una frase de Miller que me resonó al trabajar esta viñeta clínica:

…por tanto, incluiré a la vergüenza en tanto forma parte de la culpa, pero en tanto culpabilidad, diferencia que me parece interesante articular en el caso.

Y mi objetivo es retomar el caso a partir de la transformación que opera Lacan en su última enseñanza, a partir del aparejamiento primitivo entre significante y goce; a partir del “hay goce” antes que Otro…

Se trata de un sueño que el paciente de esta analista cuenta, a propósito de un síntoma en el cuerpo: una tosesita que no puede controlar y que le molesta en exceso.

Esta tos el paciente la remite a una posible finalidad: advertir a alguien de su presencia. Cuenta un recuerdo y una fantasía con la analista, asociado a esto, en la que él estaba en una habitación “donde no debía estar” y temiendo que lo descubrieran, ladraba como un perro.

Las asociaciones siguen: el paciente cuenta, con mucha vergüenza, el recuerdo de un perro restregándose en su pierna, algo que él no evitó, lo dejó seguir aunque alguien podría haber entrado a esa habitación donde eso sucedía. Allí, cuando está contando esto, el paciente tose. Y seguidamente cuenta un sueño que la analista lee como una fantasía de masturbación, y que considera de fundamental importancia.

El enunciado del sueño: Hacía un viaje con su esposa alrededor del mundo, y en el camino se encuentra una mujer de mirada apasionada, que quería tener relaciones sexuales con él, tomando ella la iniciativa (algo que al paciente en la vida despierta le facilitaba bastante el encuentro sexual) Echada sobre él, la mujer quería meter su pene dentro de sí, y él no estaba de acuerdo. Al mostrarse desilusionada, él pensó que debía masturbarla : “masturbate her”: un verbo que no se usa de forma transitiva, algo que la analista le señala. En el sueño, la vagina le apretaba el dedo y él ve los genitales de ella de frente, el extremo de la vulva “algo grande y sobresaliente que colgaba hacia abajo como el pliego de una capucha”. Eso mismo era lo que la mujer usaba para conseguir su pene. Dejemos acá y seguiré con el desarrollo el siguiente post.