Consejos para mejorar la concentración
Cuando aprendemos a vivir el momento presente la felicidad llama a la puerta de nuestra vida porque aprendemos realmente a vivir, a saborear el momento que estamos viviendo y a no estar preocupados con problemas del pasado o del futuro.
Digamos que aprendemos a poner un orden, una agenda en nuestra vida de tal forma que solo nos ocupamos de lo que nos toca o con lo que se nos presenta en ese momento.
Es fundamental para poder conseguir este objetivo que aprendamos el poderoso arte de la concentración, un poder casi mágico que es la clave para aprender a vivir de forma inteligente pudiendo saborear cada momento.
Por eso en el artículo de hoy vamos a intentar darte algunos consejos prácticos para que verdaderamente puedas llegar a desarrollar la concentración.
Para poder definir lo más correctamente posible lo que es la concentración vamos a acudir a la definición que nos da la Real Academia de la Lengua Española que la define de la siguiente manera: «la acción y efecto de centrar intensamente la atención en algo».
Nos podemos dar cuenta de lo deficiente que es nuestra concentración cuando intentamos concentrarnos en algo y vemos como nuestra mente se dispersa con gran facilidad.
Nos ponemos delante del fuego, por ejemplo para mantener toda nuestra atención en ese elemento y cuando nos damos cuenta, a los pocos segundos ya estamos pensando en otras cosas y con otros problemas en la cabeza.
Ademas la concentración nos hace mucho mas eficaces en el trabajo, en los estudios y en todas las actividades que realicemos. Hasta un paseo por lugares habituales para nosotros lo viviremos de forma diferente si estamos en concentración.
Para poder educarnos en la concentración debemos de empezar por descansar las horas suficientes y necesarias cada noche. Una persona cansada mantiene la concentración con más dificultad.
A la hora de los estudios el escribir a mano nos ayuda a retener y recordar la información con mucha mas facilidad que si lo hacemos por los métodos modernos habituales.
El estrés reduce nuestra capacidad de concentración y una buena concentración reduce el estrés. Para solucionar este problema circular se hace necesario aprender a relajarnos.
Hay juegos antiquísimos como el ajedrez que nos ayudan a mejorar nuestra dañada concentración ya que son juegos que requieren relajación, estados mentales pausados y no distraernos para poder ganar.
Cuando somos novatos en esto de la concentración se hace importante evitar la mayor cantidad de elementos distractores posibles. Esto puede parecer obvio pero es bastante común estudiar con muchos ruidos de fondo.
Pero el consejo mas importante que debemos de seguir es el de planificar nuestro día de tal forma que cada actividad este perfectamente programada de tal forma que nuestra mente no tenga que preocuparse de eso y pueda dedicarse plenamente a lo que está haciendo que no es otra cosa que estar concentrado, el primer paso para aprender a vivir el momento y más importante aún, para aprender a vivir.