Psicología Transpersonal – Parte I
El aprendizaje en esta vida ineludible, es aprender a ver lo invisible
Este movimiento comienza en la década de los años sesenta, como reacción hacia la tendencia de la Psicología de esa época materialista y mecanicista, como la visión del hombre del Conductismo y el Psicoanálisis.
Sigmund Freud concibe a la personalidad como un aparato psíquico que funciona como un mecanismo de fuerzas inconscientes; y las teorías norteamericanas conductistas que consideran la conducta como el resultado de meras respuestas a estímulos, explicación insuficiente para entender la complejidad del hombre.
Los psiquiatras de ese entonces experimentando con psicofármacos, observaron que algunos pacientes que recibían LSD para sus tratamientos podían alcanzar estados de conciencia alterados y percibir experiencias más allá de la realidad personal.
Abraham Maslow fue el que denominó “transpersonal” al intento de desarrollar una nueva psicología que estudiara los fenómenos inexplicables de la conciencia que hasta ese momento nadie había querido investigar.
Stanislav Grof, pudo comprobar que ciertos pacientes también podían experimentar esos mismos estados de conciencia alterados mediante otra técnica menos cuestionada, que él denominó respiración holotrópica.
Esta doctrina psicológica también recibió la influencia de religiones orientales como el budismo y el hinduismo y de algunas doctrinas místicas, de la Parapsicología, la Psicología Cognitiva y de las Ciencias que estudian el Sistema Nervioso y su funcionamiento e investigan los fenómenos psíquicos que aún hoy representan un enigma para la ciencia.
Esta nueva forma de concebir al hombre, como un ser en relación con los que lo rodean, que forma parte de la naturaleza y del Universo, cuyas experiencias individuales le permiten interpretar la realidad de una manera más profunda; puede brindar a los seres humanos confundidos y extraviados, que han perdido sus valores, la posibilidad de desarrollar una identidad transpersonal.
Stanislav Grof observaba con mucho interés las experiencias recurrentes de sus pacientes, como la memoria de vidas pasadas, las sensaciones de unión con el cosmos, los recuerdos de reencarnaciones como animales y el conocimiento detallado de lugares donde nunca habían estado antes.
El hombre, desde épocas remotas ha experimentado la expansión de la conciencia más allá de lo personal, experimentando una conexión con otra realidad más plena e invisible, que le ha permitido intuir el sentido de su existencia.
Estas intuiciones corresponden a las revelaciones místicas experimentadas por los antiguos profetas, interpretadas como voces o guías interiores que posteriormente fueron la fuente de las religiones.
La Psicología Transpersonal se ha propuesto investigar científicamente estas experiencias, que hasta no hace mucho han permanecido ignoradas por las teorías clásicas, a la luz de los nuevos descubrimientos de la ciencia.
La memoria de vidas pasadas en estados alterados de conciencia, son hechos cada día más numerosos que se han llegado a comprobar por medio de la descripción que hacen los voluntarios que participan en estas investigaciones, los cuales recuerdan sus nombres y apellidos en otras vidas, lugares donde vivieron, fechas y detalles precisos sobre los episodios sobresalientes vividos y hasta su muerte, que posteriormente fueron verificados.
Estas experiencias fueron las que originaron el interés en continuar con el estudio sistemático y controlado de cada uno de estos casos.
Pero no todos lo que intervienen como voluntarios logran recordar haber vivido en otras épocas ya que sólo algunos de ellos llegan a tener esa experiencia.
Esta circunstancia es el gran obstáculo que impide avanzar con esta investigación con el suficiente rigor científico. No obstante, lo que resulta sorprendente y mantiene el interés de los científicos es la veracidad y la exactitud de algunos relatos.
(continúa en Parte II)