Psicología Transpersonal
La Psicología Transpersonal es una modalidad terapéutica cuyo objetivo es lograr un estado de conciencia más elevado, más allá del Ego y de la personalidad, haciendo posible, mediante la conexión de lo psicológico con lo espiritual, el equilibrio y el bienestar biopsicosocial del paciente.
Los estados de conciencia más elevados son aquellos en que la identidad trasciende más allá del cuerpo físico y se percibe la comunión con el Universo.
Esta corriente surge en los años sesenta como una necesidad de conectar el mundo simbólico del hombre con los conocimientos de las distintas corrientes psicológicas existentes.
La Psicología humanista fue precursora de este movimiento, con una visión holística del hombre como una totalidad.
En los años sesenta, hubo una difusión masiva de las religiones orientales en Occidente, respondiendo a la insatisfacción del hombre moderno inmerso en una cultura materialista y decadente.
El Yoga y la Meditación se convirtieron en recursos valiosos para sobrellevar el vacío existencial que se manifestaba en las grandes ciudades por la pérdida de la fe, el aislamiento y la falta de sentido de la vida.
Asi, estos estados de conciencia trascendentes, dejaron de ser sólo para poderosos y se extendieron a las personas comunes, ávidas de un cambio de paradigma que respondiera mejor a sus necesidades.
Los grandes filósofos antiguos de occidente, como Pitágoras, Heráclito y hasta Platón, además de concebir un mundo racional y la capacidad del hombre de llegar a conocerlo, pertenecían a sectas secretas, donde podían expresar sus inquietudes místicas para tratar de investigar los fenómenos inexplicables de la naturaleza.
En 1956, Roberto Assagioli, médico psiquiatra italiano, fue uno de los primeros en utilizar el término Psicología Transpersonal. y siguiendo el concepto de Inconsciente Colectivo de Carl Gustav Jung, lo transformó en el Inconsciente Superior o Self Transpersonal.
Stanislav Grof, médico psiquiatra, psicoanalista, nacido en Praga, estuvo a punto de abandonar la psiquiatria por la ineficacia de los tratamientos, hasta que un día, recibió de un laboratorio una muestra de un alucinógeno llamado LSD.
Investigó con esta droga con él mismo y con sus pacientes y pudo constatar que se lograban experiencias transpersonales que provocaban una mayor apertura de la conciencia al mundo.
El LSD permitía volver a revivir episodios traumáticos del pasado ocultos en la mente. Al poder revivirlos nuevamente emocionalmente, los pacientes tenían la oportunidad de integrar su experiencia para poder lograr el equilibrio y el cambio de su visión del mundo y sobre sí mismos. Estos episodios no se limitaban a esta vida sino que se extendían a vidas anteriores a las cuales los pacientes sometidos a este tratamiento lograban acceder.
Posteriormente, Stanislav Grof abandonó el uso del LSD, logrando los mismos resultados con la técnica denominada respiración holotrópica (respiración voluntaria controlada) obteniendo el acceso a una dimensión religiosa y espiritual con enorme potencial terapéutico.
Dentro de este encuadre, se acepta el concepto de karma, que se concibe como un condicionamiento de vidas pasadas el cual hay que trascender.
Existen otros profesionales que utilizan otras técnicas como la hipnosis, o la asociación libre en estado de relajación profunda, logrando también regresiones a vidas anteriores y obteniendo los mismos resultados.
El Dr.Brian Weisz, médico psiquiatra norteamericano, escribió hace ya algunos años, un libro titulado “Muchas vidas muchos maestros” en el cual narra sus experiencias como psiquiatra organicista ortodoxo, que descubre la capacidad de sus pacientes para retroceder en el tiempo en estado hipnótico más allá de su nacimiento.
Es interesante, ver cómo una persona completamente escéptica, con una formación académica científica muy rigurosa, de alto prestigio en Estados Unidos, se transforma, a la luz de su descubrimiento en la práctica clínica, en un difusor de estos conocimientos a través de sus libros y conferencias por todo el mundo.