Terapia Ocupacional

El arte, el deporte y el trabajo artesanal son formas de terapia ocupacional

El hombre es artífice de la cultura y la cultura es todo lo que el hombre hace.

La identidad del hombre se afianza en su quehacer cotidiano y la identidad profesional se logra cuando una persona puede ser creativa en lo que hace.

La discapacidad obliga a las personas a enfrentar un nuevo desafío existencial, la búsqueda de una posibilidad de desarrollo y crecimiento, desde sus limitaciones, para poder trascenderlas.

Se puede afirmar que la creatividad no tiene fronteras, porque cualquier impedimento que parece insalvable resulta para algunas personas, una condición necesaria para ampliar su horizonte.

Muchos necesitaron una discapacidad para hacer precisamente aquello para lo cual habían nacido. De otro modo jamás habrían podido dedicarse a ello, ya sea por falta de motivación, prejuicios, falta de confianza en si mismos, falsas creencias o simplemente por pereza intelectual.

La vida a veces interviene en forma drástica para que recuperemos nuestro propio camino y es probable que seamos nosotros mismos los que inconscientemente nos exponemos a ciertas situaciones riesgosas y hasta nos enfermemos, con la intención de producir un cambio.

El terapeuta ocupacional ayuda y guía a las personas con discapacidad mental o física; o que han sufrido accidentes o enfermedades que les impiden continuar con sus actividades habituales; a encontrar un quehacer adecuado a su condición, que satisfaga sus intereses y que le permita el desarrollo de la creatividad y la posibilidad de adoptarlo como medio de vida para recuperar la independencia.

Existen en el mundo personas famosas que se han destacado después de sufrir una grave enfermedad que les produjo severas secuelas.

Deportistas que llegaron a competir en las olimpíadas sólo cuando se vieron privados de sus dos piernas, ciegos, que se destacaron como grandes cantantes, sordos que fueron genios musicales y que lograron crear sus obras cumbres en el aislamiento que le producía su falta de audición y personas con enfermedades crónicas degenerativas que se convirtieron en famosos por sus teorías en el campo de la ciencia.

Antes de esas circunstancias fatales que los privó de sus facultades normales, la mayoría eran personas comunes, en algunos casos descarriados, desorientados que no lograban hallar el sentido de sus vidas, que de pronto se encontraron frente a frente con una bisagra en sus vidas que los obligó a replantearse el sentido de la existencia.

Es la paradoja de la existencia humana, la ocasión de encontrar una salida y ver un horizonte más amplio cuando tocamos fondo parece ser lo que hace, que lo que no seamos capaces de hacer con todas nuestras facultades en perfectas condiciones, podamos hacerlo solamente cuando sufrimos alguna desventaja.

Pero no todos responden a la adversidad entendiéndola como un nuevo desafío, por eso, para todos aquellos que deciden deprimirse, que pierden su autoestima, que no pueden recuperar el camino y no ven una salida existen los terapeutas ocupacionales.

A veces, algunos de estos pacientes resuelven convertirse ellos mismos en excelentes terapeutas al desear ayudar y transmitir su experiencia a otros como él , al tener la oportunidad de ver la vida desde una nueva perspectiva.