Freud y Da Vinci
En 1910 Freud escribe un artículo sobre una figura muy influyente en la época del Renacimiento italiano: Leonardo Da Vinci.
Tengo que decir que esta novedad de abordar a un artista desde el psicoanálisis tiene luego sus desviaciones, hasta el hecho de que se haya hecho un «psicoanálisis del arte», o al punto de interpretar al artista a partir de su obra.
Freud osó inmiscuirse en estos temas no con cualquier artista…
Tal vez haya sido lo enigmático de su figura lo que llevó a Freud a hablar sobre él.
El tema es que hoy en día la relación entre psicoanálisis y arte se escribe diferente. es el artista el que le enseña al analista, el que le lleva la delantera, dice Lacan, en su homenaje a Margarite Duràs.
Pero Freud abordó esta relación con el arte desde su teoría, claro.
Freud se pregunta por qué los contemporáneos de Leonardo no comprendían su personalidad. Leonardo Da Vinci era esbelto, bello, alegre, amable, gustaba adornarse con vestimentas llamativas y adoraba la vida refinada…
El mismo en su «Tratado sobre la pintura» compara al pintor con el escultor. De este último dice qeu a diferencia de aquel, siempre está lleno de polvo, hasta parece un panadero…Mientras que el pintor siempre está sentado con su pincel en lamano frente a su obra, cómodo y bien vestido…
Freud considera que esto le escribió en un primer momento de su vida, ya que luego de haber sido echado de Milan por Ludovico Sforza (apodado el Moro) tuvo una vida errante, con poco éxito.
Se radicó en Francia, fue abandonando su arte, lo que lo separó aún más de sus contemporáneos. Empezó a interesarse por «investigaciones científicas» que algunos tildaban de «magia negra».
Es así que iba muy despacio con sus trabajos de pintura, incluso dejaba sus obras inacabadas…
Dice Freud que Leonardo parecía indiferente al bien y al mal, que tenía ciertas actitudes femeninas que lo obligaban a Freud a hablar de ello: Leonardo sentía repulsión por la sexualidad femenina, hasta dudan sus biógrafos de que haya estado alguna vez con una mujer -aunque tampoco consideran que haya tenido algún amor platónico.
Fue sospechado de homosexualidad, denunciado por ello, pero luego absuelto. Las sospechas surgieron a partir de tener como modelo a un joven de «dudosa fama». Téngase en cuenta que se rodeaba de hermosos adolescentes y jóvenes, que tomaba como discípulos, hasta el punto de que uno de ellos lo acompañó a Francia y estuvo con él ghasta su muerte; de hecho fue su único heredero.
El tema es que más allá de esto, y de las peleas entre sus biógrafos, Da Vinci nunca fue atribuido de una vida sexual intensa.
Freud considera que esto tiene que ver con que Da Vinci convirtió toda su pasión en ansias de saber, que sus afectos tenían un destino que era el de la investigación, y que allí sublimaba toda su energía sexual…
Freud considera, respecto de su teoría sobre la sexualidad infantil, que una vez terminada esta época de investigación de la sexualidad en la infancia, hay represión sexual, y de esto derivan tres tipos de inhibiciones Y sitúa el caso de Da Vinci en el tercer «tipo» que esclarece: la represión sexual no llega a derivar toda la libido al inconsciente y lo que hay es sublimación de esa libido en la investigación, muy intensa por cierto.
Aquí Freud ubica a Leonardo, en quien coinciden esa pulsión dominante en detrimento de su vida sexual.