Procura que tu aprendizaje sea significativo
Constantemente nos llegan mensajes que nos alientan a no dejar nunca de aprender. Así planteado nos enfrentamos a un concepto más bien vago e impreciso. Qué aprender es la primera duda que nos aborda. Tendremos mayor predisposición para aprender aquello que tiene sentido para nosotros, aquello que necesitamos o que nos interesa y motiva. No nos conformemos con aprender de memoria, de manera mecánica o repetitiva. Asimilar conocimientos de manera aislada resulta poco operativo a nivel de transferencia a la vida real y acaban por caer en el olvido.Ésto es tan aburrido que acabará por parecernos una tarea inútil y la abandonaremos sin pena alguna.
Entramos, pues, de lleno en la cuestión del cómo aprender. Para que un aprendizaje merezca el esfuerzo, procuremos que se trate de un aprendizaje significativo. Por tanto, promovamos un aprendizaje relacional, en el que se evidencien los nexos del conocimiento ya adquirido con el nuevo, con la experiencia personal, con la realidad, con lo cotidiano, etc.
Se trata de remover los conocimientos previos para que faciliten el ajuste de los que están llegando para que encajen perfectamente y queden fijados de manera permanente. Se precisan estrategias que implican directamente al aprendiz, puesto que se convierte en el actor principal de su aprendizaje. Participa activamente en la creación del mismo lo cual redunda en un aumento de la motivación.
Para que un aprendizaje alcance el grado de significativo, se requiere una laboriosidad mental potente y profunda. Cuando el aprendizaje es un objetivo en la enseñanza formal, se ha de favorecer el empleo de estrategias didácticas que favorezcan la construcción del conocimiento, presentando la información coherentemente, contextualizada de tal forma que se reine la lógica y el pragmatismo.
Aprender es expandir y aprender significativamente es expandir sin límite. Nuestro pozo del saber no se llena nunca, siempre queda hueco para algo más. Además, se trata de una actividad tremendamente gratificante por la recompensa tan provechosa a un trabajo mental tan complejo. La estructura cognitiva se va formando mediante interconexiones creadas entre conocimientos, experiencias, intereses, motivaciones o cualquier aspecto que se incluya en
En este contexto, conceptos como diversidad, colaboración, trabajo en equipo o creatividad adquieren gran relevancia puesto que todo lo experiencial, lo que experimentamos y hacemos nosotros mismos deja una huella mucho más profunda y duradera que si el aprendizaje es pasivo, y el aprendiz es un mero receptor de información.
Es el terreno perfecto para utilizar los múltiples recursos disponibles a nuestro alrededor. Internet y todo lo que nos ofrece facilita el acceso a cualquier información que se precise. Mirar, oler, tocar o manipular cualquier material, objeto, o medio impulsará los mecanismos de aprendizaje de una manera directa.
A pesar de las garantías que ofrece esta corriente de pensamiento, todavía la mayoría de los centros educativos siguen utilizando métodos tradicionales de transmisión del conocimiento, no de construcción de mismo. Es obvio que se trata de un reto que plantea la necesidad de cambiar la filosofía educativa lo que implica que todos los miembros asuman una nueva forma de desempeñar la labor docente.