Los Sueños y su Relación con lo Paranormal
Los sueños han sido considerados muy a menudo como el acceso al mundo de la mística y es todavía para muchos un fenómeno con significados inexplicables.
Los prejuicios frente a ciertas especulaciones son muchas veces adecuados y justificados pero otras veces han resultado erróneos y perjudiciales. La historia de la ciencia está llena de conocimientos surgidos de ideas que parecían descabelladas, que nos hacen ser más precavidos a la hora de una condena demasiado rápida.
El hombre tiene una especial inclinación a la credulidad y se siente atraída por la milagrería, probablemente por su condición de ser contingente.
En el mundo místico todo se repite desde épocas muy antiguas y en realidad nunca sucede verdaderamente algo nuevo. No obstante, una actitud abierta al cambio nos obliga a investigar las cuestiones ocultas que ocurren en el presente.
Es frecuente soñar con sucesos significativos que a muchos kilómetros de distancia les ocurren a personas con las cuales estamos ligados emocionalmente, y que antes que nos llamen por teléfono ya conozcamos la noticia que tienen para darnos.
¿Cómo podemos enterarnos espontáneamente de lo que les ocurre a esas personas estando tan lejos y totalmente incomunicadas con nosotros, sin utilizar ningún medio tecnológico?
Como es sabido, se ignora cómo se establece en las comunidades de insectos la voluntad colectiva. La hipótesis que más se sostiene es que posiblemente se trate de una transferencia psíquica directa.
Es probable que ese haya sido el medio original arcaico de transmisión inteligente también entre los humanos; y que aún en la actualidad se conserve y pueda hacerse efectivo en determinadas condiciones emocionales.
La telepatía existe como un proceso real, y a pesar de su difícil demostración, la observación nos demuestra que es un fenómeno muy frecuente.
Durante el sueño tenemos la posibilidad de conectarnos con el inconsciente, y si consideramos como sugiere Carl G. Jung, que el inconsciente contiene toda la historia de la humanidad, y la totalidad de los conocimientos del hombre del pasado, del presente y hasta también los del futuro; nuestros actos de creatividad serían nada más que los recuerdos que surgen de nuestro inconsciente.
El futuro cronológico no existe en el Universo, porque el tiempo no es absoluto sino relativo según la Teoría de la Relatividad, no obstante, nuestras vivencias temporales son secuenciales debido a nuestras limitaciones materiales que nos mantienen capturados en una dimensión espacio temporal.
El sueño recurre casi siempre a símbolos cuya significación ignora el soñante pero cuyo sentido se puede conocer ; y la memoria durante el sueño tiene mucho más vasto alcance que la memoria durante la vigilia. Un sueño puede traer recuerdos que el soñante ha olvidado y que le son inaccesibles durante la vigilia.
Además se ha comprobado que el sueño trae contenidos que no pueden proceder ni de la vida adulta ni de la infancia olvidada del soñante y se puede considerar que se trata de una parte de la herencia arcaica que el niño trae consigo al mundo, antes de cualquier experiencia propia, como resultado de las experiencias de sus antepasados.
Desde otro punto de vista, para los que creen en la reencarnación, el sueño nos permitiría la regresión a vidas pasadas, porque durante el sueño vuelven a la memoria en forma simbólica o no, experiencias significativas que no tienen ninguna relación con nuestra vida actual, pero sí se vinculan con personas que han vivido en otras épocas; aportándonos también conocimientos sobre lo que ocurre en el intervalo entre las distintas vidas, que curiosamente coinciden con antiguos conceptos místicos.