La importancia de la educación sexual.
Es importante hacer hincapié, más en estos últimos tiempos en la Educación Sexual de calidad, tanto desde los Centros Educativos, como desde Redes Sociales y plataformas virtuales, a través de los cuales, los Profesionales puedan transmitir información relevante a toda la población.
Los impulsos sexuales y agresivos, se han reprimido, según la postura freudiana, para poder vivir en sociedad. Si todos siguiéramos nuestros impulsos constantemente viviríamos en el caos. Sin embargo, esto se ha llevado al extremo de ser invisibilizado, oculto, situación que produce efectos contrarios a los que se intentaban buscar.
La sexualidad se fue instaurando en las sociedades civilizadas como un tema tabú. La religión la ha censurado, y aún lo hace, enormemente, siendo asociada con actos pecaminosos. Así, fuimos excluyendo el diálogo entorno a lo sexual de los ámbitos sociales. Efectos que llegan a los vínculos de pareja, donde muchas veces resulta difícil, incluso para parejas que llevan juntos muchos años, poder hablar de ello.
Por este motivo y por la necesidad de repensar la educación de las futuras generaciones, no solamente entorno a la sexualidad, sino de manera global, es que se considera relevante abordar esta temática.
Con el auge de la tecnología, el acceso a la información se ha vuelto masiva. El problema con esto es que no toda la información que circula en internet es confiable, y los púberes y adolescentes están creciendo y aprendiendo, muchas veces, en base a mitos o ideas erróneas entorno a lo que es la sexualidad.
La pornografía convencional transmite no solo ideas erróneas, sino conceptos propios de una estructura patriarcal que distan mucho de ser cercanos a las verdaderas experiencias sexuales. A lo largo de muchos años, estas fueron y aún hoy son las referencias que toman los jóvenes para desempeñarse en este plano, creyendo que eso es lo que deben hacer.
La sexualidad es una parte fundamental del individuo. El Psicoanálisis considera que es central dentro del psiquismo. La represión de sus impulsos y las experiencias sexuales infantiles son un punto clave en la historia particular de un sujeto.
Estar en contacto con nuestra sexualidad de manera saludable, debe ser propiciado por la información correcta y además, debe ser habilitado por un entorno seguro, que no censura y que resguarda. Las temáticas de género también deben tener llegada a los jóvenes; la información acerca de la identidad de género y la elección sexual deberían estar disponibles para todos y todas.
Para eso, es necesario incorporar planes de salud sexual integral en las escuelas, y permitir desde el plano familiar el acceso a información de calidad, acompañando a los jóvenes, respetando su privacidad y permitiéndoles expresar sus dudas.
Estamos en un momento histórico de cambio, donde muchas estructuras se evidencian obsoletas. Necesitamos estar disponibles y colaborar para que esos cambios se lleven a cabo en la dirección que nos permita evolucionar.
El vínculo de cada uno con su propia sexualidad tiene que poder ser ya aceptado, visibilizado, permitiendo que caigan mitos e ideas dogmáticas, que producen tanto daño en el psiquismo.
Es fundamental en esta instancia contar con educación sexual con perspectiva de género en escuelas y centros educativos. Esto ayuda profundamente a los conflictos de identidad que ya se manifiestan a edades muy tempranas. Trabajar entorno a la sexualidad permite aliviar el sentimiento de culpa, y poder acceder a estos aspectos de manera más libre.
Conocer más sobre sexualidad nos permite avanzar en la aceptación de los demás, y en el respeto por su individualidad.
