Psicología de la Gestalt
La mente tiene la capacidad de darle forma a la realidad.
La Psicología de la Gestalt, significa Psicología de la forma o Psicología de la Estructura. Corresponde a la escuela alemana de Psicología fundada en 1912 por Max Wertheimer, Wolfgang Köhler y Kurt Koffka.
Contraria al asociacionismo, sostiene que el conocimiento de un objeto no se obtiene a partir de datos sensibles aislados, sino teniendo en cuenta el conjunto o configuración global, como un todo que a la vez condiciona las partes.
El término Gestalt o buena forma, abarca todos los niveles del hombre, desde el fisiológico hasta el intelectual.
El individuo no percibe nunca sensaciones aisladas sino una multiplicidad de ellas que son ordenadas por estructuras nerviosas y motrices innatas y por el aprendizaje, la experiencia, y los condicionamientos culturales y sociales, que dan lugar a las imágenes, que son los símbolos de los conceptos.
Max Wertheimer, (1880-1945), Psicólogo checoslovaco, Profesor en Berlin y Francfort, emigró a los Estados Unidos en 1933 desempeñándose desde entonces como profesor universitario en New York donde se dedicó a sistematizar los conceptos principales de la Teoría de la Forma.
Wolfgang Köhler, (1887-1967), psicólogo alemán , profesor universitario en Berlin y desde 1937 profesor universitario en los Estados Unidos, participó en el desarrollo de esta teoría, interesándose en las investigaciones sobre la inteligencia animal y sobre las formas físicas.
Kurt Koffka (1886-1941) también psicólogo alemán que como muchos científicos judíos emigraron a los Estados Unidos antes de la segunda guerra mundial, figura como uno de los creadores de la Teoría de la Forma o de la Estructura, que se opone a la visión atomista de la realidad, que predominaba en el siglo XIX, considerando a la percepción la capacidad de ver totalidades estructuradas y no sus elementos aislados.
Esta corriente de pensamiento influyó en distintos aspectos de la ciencia, de la educación y de la historia modificando el modo de entender los procesos a partir de configuraciones significativas y no como una suma de hechos o conocimientos aislados.
El estudio de los fenómenos de la percepción, dieron lugar al surgimiento de numerosos instrumentos de medición llamados tests proyectivos capaces de evaluar funciones psicológicas como la inteligencia, la personalidad, el estado emocional y psicológico de un paciente y también las posibles patologías.
El paciente proyecta en las imágenes difusas que se le presentan, experiencias, estados emocionales, aprendizajes, influencias culturales y funcionamientos neurológicos, datos que contribuyen a confirmar un diagnóstico, siendo abordado en la terapia como un todo, en forma global, de manera holística.
La Psicología de la Gestalt supone el funcionamiento del sistema nervioso como una interacción dinámica que reproduce la misma organización del sistema solar. Acepta la experiencia inmediata como dato fáctico, se opone al uso exclusivo del tipo de observación introspeccionista e insiste en que la experiencia ingenua del sentido común tiene derecho a ser considerada en Psicología.
Creen en el tipo de observación sin corregir llamado fenomenológico, lo que sucede en el aquí y ahora, cuya organización estaría basada en la experiencia, y que resultaría inexplicable en función de elementos separados.
Existe una tendencia a la forma en las reacciones frente a una percepción, hasta el punto que si la situación externa no es muy clara la reacción psicológica tiende a completarla. La experiencia tiende a asumir la mejor forma posible, de tal manera que éstas tienden a hacerse más precisas y más claramente definidas.
Esta corriente ha ejercido una influencia renovadora sobre la psicología en su conjunto y en el abordaje terapéutico.