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Sexualidad

Publicado por Malena

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La educación sexual debe estar destinada a los padres para que puedan trasladar esos conocimientos con naturalidad e idoneidad a sus hijos.

La ley no permite a un menor de edad asumir la responsabilidad de contraer matrimonio sin la autorización de sus padres.

Esto supone que tampoco es responsable para tener relaciones sexuales ocasionales o estables.

La primera experiencia sexual de una mujer puede influenciar su comportamiento posterior en pareja; de modo que si es placentera y satisfactoria significará que sus futuras relaciones no sufrirán ninguna perturbación por esta causa.

Pero por lo general, las primeras experiencias tempranas que tienen las adolescentes suelen resultarles frustrantes.

Esto sucede principalmente porque las parejas muy jóvenes no están en condiciones de elegir el escenario adecuado que les brinde la intimidad necesaria para disfrutar plenamente del acto sexual.

La gente joven experimenta la sexualidad a las apuradas, en cualquier lugar, sin ningún tipo de tranquilidad ni comodidad, que a ellos no los privará de obtener placer y llegar a la eyaculación pero a ellas las puede dejar insatisfechas y frustradas.

Las mujeres necesitan clima íntimo, romance, caricias, besos, y la tranquilidad de un ambiente adecuado que la predisponga favorablemente al encuentro amoroso; y estas condiciones nunca podrán darse en cualquier rincón oscuro, sin protección, con alguien que no la conmueve emocionalmente.; porque a la mujer no le resulta fácil disociar el sexo del amor. Por eso no deberían acceder a tener relaciones sexuales limitadas por el tiempo y el espacio.

El sexo sin amor no permite su necesaria integración para lograr la madurez sexual; porque si se mantiene esta disociación se tenderá en el futuro a tener sexo sin amor fuera del matrimonio o de la pareja estable.

Si una pareja menor es lo suficientemente madura como para tener relaciones sexuales responsables tendrá que planificar sobre la posibilidad de un embarazo para en esa eventualidad hacerse cargo o bien elegir previamente el método anticonceptivo que les resulte satisfactorio a ambos, para evitar los embarazos.

Las mujeres viven la sexualidad en forma muy diferente al hombre. Investigaciones realizadas en los Estados Unidos midieron mediante resonancias magnéticas, las respuestas sexuales de mujeres y hombres al exhibirles fotografías de hombres y mujeres desnudos.

Se demostró que las imágenes femeninas producían en los hombres respuestas sexuales y las masculinas respuestas de defensa frente a una amenaza o peligro.

En las mujeres, las fotos masculinas producían poca o ninguna respuesta y las femeninas nada.

El 78% de los hombres registraron excitación visual a primera vista, reaccionando frente al rostro y la proporción del cuerpo femenino entre la cintura y la cadera (que representa un indicador de fertilidad).

El 54% de las mujeres reaccionaron a primera vista teniendo en cuenta la simetría del cuerpo masculino y su atractivo físico.

Estos estudios también demostraron que la atracción mutua inmediata es poco común.

Según las encuestas realizadas para esta investigación, ambos sexos se interesan en tener parejas que tengan sentido del humor, objetivos comunes, que sean comunicativas, confiables, atractivas físicamente o simplemente que la persona los conmueva sin ninguna expectativa previa.

El hombre necesitan un solo sentido para excitarse sexualmente, que es el visual, y perciben en primer lugar el atractivo físico y las mujeres necesitan más de un sentido para responder sexualmente y emocionalmente.