La era del «multitasking» y sus consecuencias.
¿A qué le llamamos «Multitasking»? Y, Qué consecuencias tiene para la Salud Mental y emocional?
Multi-task es un término anglosajón que podría traducirse como multi-tareas o tareas múltiples. Implica la posibilidad, acentuada por los aparatos tecnológicos, de llevar cabo varias tareas a la vez. Esto, que se ha transformado en una realidad cada vez más extendida, tiene, sin embargo, sus consecuencias a nivel de la salud mental.
En primer lugar, es cada vez más frecuente esta modalidad múltiple del hacer que implica la simultaneidad de tareas y procesos. Los aparatos tecnológicos llevan indefectiblemente a esto porque permiten tener varios canales abiertos a la vez. De este modo, al igual que las ventanas en una computadora, una tarea se comunica con otra, generando encadenamientos y procesos simultáneos múltiples.
Ver una serie, a la vez que se responden mensajes en el teléfono, y a la vez que se anotan tareas próximas en una lista, o se «scrollea» en una red social, se ha transformado en una realidad cotidiana. En las generaciones más jóvenes esto está todavía más acentuado, en tanto a que los nativos digitales, y sobre todo, los de generaciones más recientes no conocen otra realidad que esta. De modo que para ellos aún más constituye el modo «normalizado» de actuar.
Si bien la tecnología nos brinda acceso a beneficios y nos permite acceder a muchísima información sin demora, esta modalidad trae consecuencias también negativas, llevando a alterar procesos y a dificultarlos en muchos casos de manera considerable.
La gran amplitud de opciones que hoy tenemos en las comunicaciones y el acceso a la información, nos deja como responsables de cada vez mayor cantidad de decisiones y acciones que limiten nuestro consumo. Al haber menos posibilidades, hay también menos decisiones por tomar. Al aumentar las opciones, más debemos esforzarnos por elegir y encauzar, para no abrumarnos con todas estas variantes.
Se presenta aqui una paradoja, en tanto debemos limitar aquello que tiene la característica de generar dependencia. Es decir que nos enfrenta a restringir aquello que tiene todo para transformarse en algo adictivo. De modo que controlarlo y limitarlo no es algo tan libre como se supone.
Cada vez más notamos esto en relación a la tecnología. Se filtra tanto en nuestra cotidianidad que incluso llegamos a pasar por alto o a no registrar el tiempo que invertimos en ella. Esta falta de límites entre el individuo y la tecnología es tan complejo que impide efectuar un uso plenamente consciente.
La modalidad multitarea se instala, además, como un modo ultra-adaptativo en esta sociedad de consumo. Estar en todos lados a la vez parece ser una demanda cada vez más fuerte. Este desdoblamiento nos permitiría trabajar y, a la vez, consumir, comprar.
Lamentablemente el Multi¡tasking tiene sus consecuencias negativas. Dificulta los procesos de aprendizaje y retención de información, sumado a dificultades de memoria. Incrementa la ansiedad y altera considerablemente la capacidad de concentración. Genera una sensación de confusión y desorganización mental, pudiendo llevar a estados de caos o de agotamiento muy rápidamente. Dificulta el registro de las propias necesidades físicas y psicológicas, en tanto permite un afluente muy significativo de información que muchas veces excede a la capacidad de procesamiento y metbolización. Dificulta además la dimensión de ciclos y procesos entorno a lo que hacemos, llevando en muchos casos a la no finalización y a la procrastinación.
Es muy importante, entonces, observar este aspecto de la amplitud de posibilidades que la tecnología ofrece, para cuestionarlo un poco, generando posibilidad de elección y límites de modo más consciente.