Mitos y Psicología.
¿Qué relación existe entre los mitos y la psicología? ¿Cómo pueden ayudarnos y por qué son necesarios?
Hay muchas corrientes de pensamiento, por lo general, muy cientificistas y racionales, que consideran a los mitos como meras formas de dar respuesta a los interrogantes de la vida. Respuestas que se respondían de esa manera porque no se podían responder de ninguna otra. Y, a medida que se desarrolló la ciencia, fueron desvalorizados, y son considerados obsoletos e inútiles en la actualidad.
Otros autores, entre los que se encuentra Carl G. Jung, consideran a los mitos como una parte sumamente importante del psiquismo humano. Los mitos son para Jung, símbolos que representan cuestiones arquetípicas de las sociedades humanas.
En distintas culturas, distintos mitos reproducen y manifiestan historias similares, y este hallazgo es lo que llevó a Jung a considerar que no es que un mito se crea por una acción racional y deliberada de dar respuesta a algo, sino que en gran medida emergen a raíz de contenidos provenientes del Inconciente Colectivo.
Si lo vemos desde esta perspectiva, los mitos son esenciales para conocer y enmarcar asuntos humanos existenciales básicos, como el nacimiento, la muerte, el pasaje de un ciclo al otro, las polaridades y su posible trascendencia, entre otros.
Mediante la mitología podemos comprender muchas de las cuestiones que suceden en nuestra vida, y enmarcarlas en una matriz que compartimos con otros. La carencia o el vacío de mitos y símbolos en la actualidad, son según Jung la causa dela mayoría de los conflictos mayores problemas para los seres humanos.
El ser humano sin el mito está solo, lidiando y teniendo que resolver por su cuenta asuntos que fueron interpretados y enmarcados por nuestros ancestros desde tiempos inmemoriales. Es desconocer en gran medida nuestra historia y lo que nos conecta con otros.
Para Joseph Campbell, mitólogo estadounidense que tuvo intercambio con Jung, los mitos son los sueños de la sociedad. Con esto quiere decir, no solamente que son producciones en las que interviene el inconsciente, sino que también forman parte de quienes somos. Los sueños pueden manifestar asuntos personales o asuntos colectivos, y en estos últimos aparecen elementos mitológicos. Los mitos son las creaciones de los pueblos, los que nos vinculan con aquellos que vivieron mucho antes de nosotros, y lo que nos permite vincularnos con la tierra y con el mundo en el que vivimos.
Desconocerlos o negarlos, nos aísla. Gran parte de lo que vivimos, de las transiciones que experimentamos, de las pruebas o pérdidas a las que nos enfrentamos, han sido vividas ya por muchos antes. Y esas experiencias dejan su sedimento, se nos transmiten y constituyen una parte fundamental de nuestro universo psíquico.
Conocer la mitología de nuestra cultura y la de otras, nos permite reconocer de dónde venimos, por qué nos planteamos o nos angustiamos por ciertas situaciones, nos hace entender que mucho de eso viene de otra parte. La mitología de otras culturas nos permite comprender lo que nos une, más allá de los límites geográficos.
Además, los mitos pueden ser una herramienta valiosa en la terapia psicológica. Los terapeutas pueden utilizar los mitos para ayudar a los pacientes a entender y afrontar sus problemas. Por ejemplo, un terapeuta puede utilizar el mito de Hércules para ayudar a un paciente a entender su lucha contra la adicción. Los doce trabajos de Hércules pueden representar los desafíos que el paciente debe superar para vencer su adicción.
Los mitos también pueden ayudar a los pacientes a entender sus emociones. Por ejemplo, el mito de Medusa puede ser utilizado para ayudar a un paciente a entender su ira. Medusa fue transformada en un monstruo por la diosa Atenea después de que Poseidón la violara en el templo de Atenea. La ira de Medusa es comprensible, pero también es destructiva. Este mito puede ayudar a un paciente a entender que su ira es comprensible, pero que también puede ser destructiva si no se maneja adecuadamente.
Los mitos también pueden ayudar a los pacientes a entender sus relaciones. Por ejemplo, el mito de Eros y Psique puede ser utilizado para ayudar a un paciente a entender su relación con su pareja. Eros y Psique tuvieron que superar muchos desafíos para estar juntos, pero al final, su amor fue más fuerte que los obstáculos que enfrentaron. Este mito puede ayudar a un paciente a entender que las relaciones pueden ser difíciles, pero que con amor y esfuerzo, pueden superar los desafíos.
Los mitos están, desde esta perspectiva, íntimamente vinculados a la Psicología. Y conocerlos implica una parte esencial del camino de autoconocimiento.