La Rigidez mental
Hoy vamos a hablar de un concepto denominado rigidez mental y que se trata de un conjunto de patrones mentales inamovibles bajo los que una persona rige su comportamiento y que desde el punto de vista de la psicología nos impide crecer como personas y a encontrar nuevos horizontes en la vida.
El ejercicio que os proponemos en el día de hoy es el de abrir la mente ya que en mayor o en menor medida todos tenemos cierta rigidez mental. ¿Y si eso que nos exponen desde otro punto de vista y que nos parece tan malo o tan imposible lo es solamente por culpa de nuestra rigidez mental?
Tengamos en cuenta que nuestro proceso de aprendizaje desde que somos pequeños no es ni más ni menos que una forma de progresar por un lado pero de cerrar otras puertas que dejan de ser posibilidades en nuestra vida. Desde el punto de vista de la rigidez mental los estereotipos formados a través del aprendizaje son anclas que nos dejan atados a una forma de vivir, de pensar, a un estilo de ideas y no nos deja avanzar en otras direcciones.
Además, la sociedad hoy en día nos enseña a ser poco maleables una vez que se ha formado nuestra personalidad y se ha dado nuestro aprendizaje en el desarrollo de tal forma que cambiar de idas o de manera de pensar está hasta mal visto.
Pensemos en los partidos políticos. Uno puede ser de tal o cual partido por el aprendizaje y experiencias que ha ido teniendo impidiéndose a sí mismo cualquier posibilidad de poder pasar de esas ideas a otras aparentemente contradictorias. En el caso de hacer algo así a esa persona se la llamaría traidora, chaquetera, etc, etc.
Pero en realidad si los propios políticos no tuvieran es rigidez mental podrían debatir sobre las partes positivas de las otras ideas y llegar acuerdos de forma más sencilla y rápida.
Una persona con rigidez mental se puede describir como alguien que piensa que solo hay una forma correcta de realizar las cosas, asumen como algo inequívoco que su forma de pensar es la única correcta y que el resto del mundo está completamente equivocado, con estas perspectivas además no están abiertos a ningún tipo de cambio en absoluto y se encuentran anclados en el pasado sin ninguna posibilidad de avanzar, una posibilidad que ellos mismos se niegan.
Estas personas quieren siempre tener la razón y son incapaces de dársela al interlocutor. Podemos reflexionar a este respecto cuanto de rigidez mental tenemos en nuestra propia psicología.
Para poder crecer y avanzar en la vida como personas debemos de tener la capacidad de romper con las ideas que teníamos hasta ahora, de tener la capacidad de abrirnos a nuevas posibilidades que nos abran nuevas vías de conocimiento y de aprendizaje.
Para poder abrirnos es importante centrarnos en nuestras emociones más que en nuestros pensamientos ya que en muchas ocasiones quisiéramos seguir una idea que nos emociona pero nuestra rigidez mental nos lo impide y además lo justifica.