Tótem y Nombre del Padre
En este post veremos cómo Lacna hace el análisis de Tótem y Tabú en Freud. Toma el título que juntó Freud: Tótem y tabú. Tabú está en la fobia. ¿Por qué juntó esas dos cosas?
Aquí Lacan podemos decir que está avanzado porque el Seminario anterior había sido dedicado a la fobia y para mostrar qué es un significante.
Imaginemonos un círculo en donde están todos los significantes, hay deseo, pero no hay ningún orden, por lo que el sujeto queda angustiado, sumergido en eso sin poder hablar nada, por efecto de este significante. Estamos viendo las miles de maneras de pensar cómo un significante puede ordenar esto.
Así que ya tenemos Nombre del Padre, teoría general, que este ordenamiento es porque acá se produjo una relación metafórica (la metáfora paterna).
Esto que nos imaginamos, ese círculo con los significantes dentro, es metonimia o concatenación de los significantes.
Entonces hay un significante que ordena pero en la medida que no se sabe porqué hay que pellizcar el cuerpo, clavarlo en el cuerpo. Ahora tenemos otra variante. La fobia no pellizca el cuerpo. No es una marca, pero lo llena de miedo. Es un afecto.
Lacan repite que no importa el sentido del significante, sirve para cualquier cosa, pero tiene un valor ordenador, para el deseo, para el sujeto, y también marca lo que está prohibido.
Así que el énfasis en Lacan es que todas estas operaciones es para decir que cuando hablamos de «Sujeto» es para entender un efecto.
Es importante, se les puede cambiar todo el mundo que tienen alrededor. En las ciudades que han sufrido catástrofes climáticas, o saqueos, ahí sí que van a empezar a “qué quiere el otro, qué desea el otro para conmigo, qué ocurre, no hay más orden, no hay más qué”, con angustias, fobias, miedos, etc. Y todos tienen un Tótem que está un poco difícil de ubicar.
Pero si uno dice quién puede resistir ante toda esta debacle de la vida, ante el fantasma de uno, es siempre un punto que es: pese a todas las pérdidas, sigo como sujeto. Si algo los sostiene como sujetos, aguantan. Si quedan como objetos destruidos, van a caer junto con el objeto.
Eso está marcado en este nivel de ordenamiento, lo que hay que ver principalmente es donde el sujeto mismo encuentra de qué agarrarse. Y ese agarrarse es a nivel de un significante.
Les destaco esto porque es más rico que las formalizaciones que hacemos después y entonces decimos Nombre del Padre. Y está muy bien. Lacan lo hizo. Y entonces decimos ¿qué es lo que puede funcionar como Nombre del Padre? Y no es tan fácil como el padre de la realidad porque todo esto es considerable como funcionamiento del Nombre del Padre, en ese valor metafórico. Y podemos decir, mientras no tenga otro, mi fobia es mi Nombre del Padre.
Bueno, esto es una aproximación a la discusión que Lacan plantea en su Seminario.
FUENTE: LACAN, J. EL SEMINARIO, LIBRO 5, LAS FORMACIONES DEL INCONSCIENTE. ED. PAIDÓS.