¿Cómo ayudar a los Adultos Mayores durante la cuarentena?
Uno de los puntos fundamentales de la cuarentena por Coronavirus, es precisamente proteger a la Tercera edad y a los Adultos mayores, ya que son población de riesgo. Es muy importante evitar el contacto con personas de este grupo etario para prevenir un posible contagio.
A la vez que surge esta necesidad, se desarrolla paralelamente otro problema. El aislamiento y la distancia de los afectos puede provocar estados depresivos, y complicar su estado de salud a raíz de la ansiedad y la angustia que esto produce.
Sabemos que para los adultos mayores en general, la cercanía de sus seres queridos, sobre todo nietos, es muy importante. Por eso, es esencial poder pensar en estrategias que colaboren con que estas medidas no terminen acarreando problemas igual de significativos que lo que se intenta evitar.
Por esto mismo, debemos estar atentos a la comunicación con ellos, además de la asistencia necesaria para compras de alimentos y trámites. Que no puedan tener contacto físico no significa que tengan que estar aislados.
Hoy mas que nunca es fundamental el contacto telefónico o a través de las redes. Más aun en el caso de aquellos que se encuentren haciendo la cuarentena solos, sin sus parejas, o sin estar junto con sus familias.
La sensación de respaldo y contención que se les pueda transmitir, aliviará los potenciales temores al aislamiento, la muerte y el abandono, que se asocian con la situación global que estamos viviendo.
Mediante un incremento del tiempo de comunicación con ellos, colaboramos con evitar que el remedio sea peor que la enfermedad. En definitiva, que el distanciamiento social que busca evitar un perjuicio, no termine provocando otro.
Una de las estrategias interesantes a llevar a cabo con adultos mayores de la familia, es que la comunicación que se tenga con ellos no sea solamente para «ver como están» y contar novedades vinculadas al virus.
Podemos proponerles actividades para que hagan, motivándolos con iniciativas sencillas que nosotros tambien estemos desarrollando. Así, podemos ir haciendo un seguimiento de algo más creativo, llamarlos al dia siguiente para ver como va ese proyecto, y tener un intercambio más rico que la mera pregunta general, que muchas veces se vuelve automática.
Los proyectos o propuestas creativas pueden ser muy simples: Organizar fotos familiares, leer algunos libros que estén en la biblioteca y que nunca hayan podido leer, hacer alguna manualidad, anotar las recetas familiares en un cuaderno, cambiar algo en la decoración de la casa, hacer un árbol genealógico. Estas pequeñas acciones pueden volver mucho mas llevadero el tránsito por la cuarentena, y sus allegados pueden ayudarlos en ese trayecto creativo, ofreciéndoles un sostén y un vínculo de apoyo que exceda a la temática constante de las noticias, que suelen generar mayor ansiedad y angustia.
Pensemos que, como con todo vínculo, el contacto que aquí interesa es el de calidad. Es decir, poder conectarnos con ellos, escuchar sus angustias y ansiedades y poder acompañar. El llamado vacío por más que sea diario, no cumple con el sostén que necesitan.
Pensemos que la salud de los mayores, quienes poseen la sabiduría de la experiencia, es un valor que debe considerarse de manera global. No podemos prevenir el contagio permitiendo que avancen o aparezcan otros síntomas. Por esto, es fundamental reforzar la atención y la contención hacia ellos en este momento tan particular.