Cuestión de angustia y Ley
En el Seminario , Las formaciones del inconsciente, Jacques Lacan nos hace el esquema más simple, el inicial, que es como una manera de graficar el abrochamiento justo de ese cuerpo que nace y la dimensión simbólica significante.
Entonces ya hay, por lo tanto, un efecto significante. El «delta», el triangulito que aparece en ese grafo (los remito a la clase X de este Seminario para revisar el esquema) es el significante que ya cruzó cualquier cosa, que puede ser el impulso vital de la cría, por ejemplo. Esto ya no será nunca nada del orden de necesidades.
Y ahí ya tenemos un primer efecto, que al final va a ser escrito como sujeto, en tanto lo que Lacan quiere mostrar es cómo pasar de los trasfondos del primer tiempo del Edipo al segundo. Entonces a este sujeto, lo llama «el asujetado» (en el Seminario aparece como «súbdito»).
Esto implica que ha intervenido en la cadena simbólica, pero es solamente esta ley materna (de la que les hablé en posts anteriores), que no es más que el significante y su falta.
Y ese «a sujetado» tiene como correlato a la angustia, la angustia más radical, la completa eliminación de su sostén en el mundo.
Lacan está pensando que ya hay un sujeto de este tiempo. Se trata entonces, en todo lo que se piensa del Edipo, de conseguir otro sujeto, un efecto de sujeto distinto.
La diferencia terminológica es que no es que en sentido general no siga a sujetado, porque va a depender de lo simbólico; pero es un sujeto en una condición distinta al que acá llama él, «el sujeto asujetado/súbdito».
Esa “a” de asujetado, más adelante la podrían llamar muy bien objeto ‘a’, porque es un primer efecto donde se cae rápidamente en esta angustia que será elaborada como la reducción de uno a un deshecho.
Por eso está más o menos traficado en ese esquema que si hubiese ahora otra corriente significante, pero de una Ley paterna, el resultado es un cambio respecto de esto, una especie de otra ubicación de alguien como sujeto. Sujeto, en tanto sujeto de un orden simbólico organizado con la Ley paterna. Antes era un mero angustiado en una ley.
Pues bien, el ascenso del que habla Lacan, de la angustia al cenit del mundo contemporáneo, toda esa teoría, es nada más que el retorno a posiciones de a sujetado -si decimos que fracasan los efectos de un sujeto edípico.
Pero tiene su orden. La misma descripción del Fort Da, de la ley caprichosa, lo que en la fórmula de la metáfora es la parte S’ sobre x, él tiene que decir que ya no es un cuerpo biológico. Ya hay sujeto del significante, pero en esta condición de a sujetado.
Bien, Lacan entonces se remite al Caso que le sirvió para ejemplificar toda esta cuestión, que es el caso Juanito al que se abocó de lleno en el Seminario , Las relaciones de objeto. Y con el que continuaremos el post siguiente.
FUENTE: LACAN, JACQUES. EL SEMINARIO DE JACQUES LACAN. LIBRO , LAS FORMACIONES DEL INCONSCIENTE. ED. PAIDÓS