Psicología
Inicio Cine, Series y Psicología, General, Motivación, Psicoanálisis Frances Ha. Descubriendo el camino propio.

Frances Ha. Descubriendo el camino propio.

Publicado por Lic. Maria V.

Frances Ha (2013) es una película independiente dirigida por Noah Baumbach, que explora los avatares de la juventud, la independencia, el deseo, la vocación y los vínculos.

A través de la protagonista, de características atípicas y neurotizadas al estilo de los personajes creados por Woody Allen, observamos el proceso del “ser joven y abrirse paso al mundo” por el que ella transita, encontrando en el camino desilusiones,  desencuentros y sorpresas.

Lo interesante de esta película es cómo se ilustra (en blanco y negro, además, y con gran sencillez) una etapa de la vida que es sumamente difícil ya que nos enfrenta con la realidad del mundo, nos contrasta con la soledad y las posibilidades reales de llevar a cabo o no nuestro deseo.

Así, la separación del seno familiar, la partida a una ciudad distinta, “llena de oportunidades” pero a la vez sumamente competitiva, la expectativa de éxito y el miedo al fracaso, las amistades como refugio, y finalmente la posibilidad de abrirse a un camino propio, se muestran como un recorrido arduo pero a la vez transitable, posible, bailable.

Literalmente la protagonista baila este recorrido, sobreponiéndose a los obstáculos hasta entender un poco de qué trata eso del camino personal.

Podríamos asociar este camino al del héroe, en este caso la heroína. Aquella que ha salido del seno familiar, protector, contenedor y que debe enfrentarse a los desafíos de la realidad en pos de conseguir lo que desea.

Frecuentemente en estos momentos las amistades se vuelven un refugio. La estrechez del vínculo familiar se traspola a la estrechez de un vínculo de amistad en el que se comparte todo y cualquier cambio o movimiento de independencia de una de las partes es percibido como amenaza.

Este tipo de vínculos reproduce esa sensación de protección de lo conocido, pero muchas veces impide el crecimiento de los individuos que forman parte de él.

Aceptar lo que los otros eligen es también la oportunidad de aceptar la realidad propia y las posibilidades reales de hacer una suerte de pacto entre lo que el mundo ofrece y lo que uno desea.

Esto se vincula con la diferenciación freudiana entre Principio de placer y Principio de realidad. La realidad coarta, implica esperas, demoras y frustraciones y enfrenta con la imposibilidad de satisfacer ese deseo de la manera que uno querría. Reconocer esto implica madurez y responsabilidad. Es corrernos de la mera fantasía y hacernos cargo de un deseo que conlleva posibilidades reales de ponerse en acto.

En el camino de Frances, aparecerán parejas que no funcionan, amistades que se alejan, sueños que no resultan posibles, orgullo, enojo, frustración, riesgos, alegrías, amistades y vínculos que sorprenden. Todo esto debió ser transitado para afianzar el deseo. Y ese es el mensaje que la película deja.

Desde la Psicología es interesante este momento de vida, crítico sin duda, donde interviene además la cuestión económica.

Ya no hay una dependencia económica plena de los padres sino que se presenta el desafío de la supervivencia por los propios medios, cuestión que confronta directamente con la competitividad y la posibilidad de ser reconocidos por las propias capacidades. 

En este baile nada sale como estaba planeado.

Como en la vida misma, lo que uno esperaba, a veces no ocurre, pero aparece algo nuevo, inesperado, y en ese juego se crea el camino mismo.

Frances Ha es uno de esos recursos que ofrece el cine que podría intervenir de modo terapéutico en la vida de quienes están desplegando un proceso similar.

La película hace de las experiencias del personaje principal un escenario compartido, a la vez que esperanzador y portador de herramientas.