La Hipersensibilidad y sus características.
¿Qué es ser hipersensible desde el punto de vista psicológico? A veces hablamos de personas sensibles o susceptibles, y lo asociamos a rasgos de vulnerabilidad.
Sin embargo, la sensibilidad es un rasgo que demuestra empatía y compasión, y es una característica sumamente valiosa que permite vincularse de modo más genuino y aprender de las experiencias. Poder manifestar angustia, conmoverse por situaciones del entorno no indica debilidad, sino que es una posición que nos permite involucrarnos, bajar las resistencias y participar emocional y psicológicamente de lo que ocurre a nuestro alrededor.
La hipersensibilidad, es de algún modo, un incremento de esa característica, que sí puede acarrear dificultades. En primer término, hace referencia a una condición en la que las circunstancias afectan al sujeto de manera excesiva y permanente.
Cualquier discusión o circunstancia angustiante puede causarle angustia, enojo e irritabilidad por bastante tiempo. Experimentando a veces incluso dolores físicos, dolores de cabeza y síntomas de ansiedad que responden a situaciones cotidianas que se perciben como estresantes.
La hipersensibilidad se asocia a personas que se enojan, ofenden o angustian fácilmente, y de manera sostenida, independientemente del contexto y de las personas que estén a su alrededor. En estos casos, podemos hablar de cierta dificultad en el manejo de las emociones o de ciertas herramientas de regulación que pueden servir para transitar por ese tipo de situaciones.
La baja tolerancia a la frustración es también una característica, ya que obedece a la desilusión o frustración que se experimenta cuando el otro no reacciona de la forma esperada. Incluso con un comentario nimio puede herir la subjetividad de la persona, que pretende un contexto siempre ameno y positivo.
La autoestima también cumple aquí un rol importante, la hipersensibilidad se asocia a una falta de confianza sobre las propias capacidades para poder lidiar, responder o defenderse ante situaciones que se perciben como poco gratas. Así, la persona considera que no posee herramientas para hacer frente a lo que le acontece, viéndose muchas veces en una posición pasiva y vulnerable, de la que no encuentra salida.
Por eso, la hipersensibilidad puede generar rechazo en las personas del entorno. La persona hipersensible puede aparecer como alguien recluido, irritable, triste, complicado o poco sociable, cuando en realidad sus comportamientos se deben a una dificultad en el manejo emocional y de respuesta frente a las situaciones.
Muchas de estas características podrían asociarse tanto con una crianza demasiado hermética y cuidada, donde no se presentaban frecuentemente personas o situaciones nuevas, como tambien como respuesta frente a un contexto de crianza caótico o agresivo, motivo por el cual el sujeto rechaza todo lo que pueda rememorar esos acontecimientos.
La hipersensibilidad también se asocia a una característica presente en aquellos dentro del espectro autista. Pero, si bien comparte su definición general, difiere considerablemente en su manifestación. La hipersensibilidad es hacia los estímulos, fundamentalmente auditivos, pero tambien táctiles y visuales entre otros, ya que todo lo sensorial se percibe de modo amplificado. Además, la hipersensibilidad se manifiesta frente a todo tipo de situaciones nuevas o imprevistas. Las personas dentro del espectro autista pueden responder con crisis ante situaciones, que otros pueden considerar insignificantes, pero que a ellos los invaden o angustian profundamente. Diremos esto a modo de caracterización porque se trata de un tema amplio y complejo que no se pretende abordar aquí.
Es interesante cuestionarnos acerca del concepto de hipersensibilidad, sus características, diferenciándola de rasgos de sensibilidad, que no son en modo alguno un problema, para así saber tomar las decisiones adecuadas, y realizar las consultas pertinentes en los casos que sea necesario.