Problemas de Conducta en los Niños
Mejorar la conducta de los niños es señal de cariño
Celina y Jorge hace diez años que están casados y tienen cuatro hijos, el mayor, es Juan que tiene nueve años, luego viene Lisa de siete años, después Romeo de cinco y por último Ramón, de sólo dos años.
Es una familia de clase media, viven en una casa en un barrio suburbano y los padres son profesionales.
Los niños son sanos pero mal educados, la madre es muy permisiva y el padre acostumbra a hablar en broma pero aprovecha para decir cosas muy hirientes a su mujer y también a los niños.
El hijo mayor imita a su padre y tiene actitudes despectivas hacia la madre, exigiéndole que lo atienda y lo sirva como hace con su padre y es agresivo con su hermana a quien molesta continuamente.
La esposa hace años que acepta esta situación porque sabe que hablan en broma y le parece divertido.
La hora de la comida es un caos. Cada uno come en lugares diferentes, cuando quiere y jamás se reúnen a la mesa a comer juntos.
Los niños salen de la casa sin permiso y se van a la casa de los vecinos sin avisar, se insultan entre si y también insultan y patean a sus padres cuando se encaprichan, y éstos toman todo a risa.
Para cambiar esta situación, que se está haciendo insostenible, los padres deciden hacer una terapia familiar breve de tipo cognitivo.
En estos casos, en que los padres han perdido el control de la familia, es necesario como primera medida que se pongan estrictas reglas en el hogar, que todos deberán cumplir, inclusive ellos.
Las reglas deberán estar escritas y expuestas en lugar visible, puede ser en una pizarra, o simplemente pegadas en los azulejos de la cocina.
Regla No.1 – Todos deben saber dónde están los demás y los niños para salir de la casa deberán pedir permiso.
Regla No.2 – Si no tienen nada bueno que decir es mejor que no hablen y menos decir palabrotas o insultar.
Regla No.3 – No actuarán como salvajes y se portarán bien, obedeciendo a mamá y papá y sin pelear entre ellos.
Regla No.4 – Todos colaborarán con la tarea de la casa y mantendrán ordenada sus habitaciones.
Regla No.5 – Los mayores cuidarán a sus hermanos menores
Regla No.6 – No recibirán nada que no se ganen
Regla No.7 – Si no respetan estas reglas recibirán una sanción.
Regla No.8 – El que recibe una sanción tendrá una consecuencia, por ejemplo, puede ser privado de alguna cosa que le guste.
Regla No.9 – Hacer las tareas del colegio en primer término
Regla No.10 –Comer todos juntos.
El que cumpla con estas reglas y se destaque recibirá recompensas.
Los niños reaccionaron favorablemente a todas estas normas y comenzaron bien, pero el padre continuó con las bromas y los insultos velados a su esposa.
La mujer no se ofende por ser tratada despectivamente y lo toma como una broma, pero el problema es que los niños imitan a sus padres, que para ellos son las figuras más significativas, y aprenden a tratar a todo el mundo igual, de manera que en el futuro pueden llegar a tener graves problemas para relacionarse.
El padre no cree que su actitud pueda afectar a los niños y no le gusta ponerse serio, porque le cuesta hablar en serio; sin embargo, tiene que saber, que uno puede reírse y hacer bromas hasta un punto y luego indefectiblemente en algún momento deberá ponerse serio.
Cuando el padre comete una trasgresión a las reglas insultando a la madre, se le impone entonces una sanción y esa noche le tocará lavar los platos de la cena.
Algunos podrán objetar estos métodos si interpretan que pueden condicionar a los niños a correr detrás de la zanahoria cuando sean adultos, pueden tener razón, pero esta técnica funciona y mucho peor será su futuro si sus padres se siguen comportando igual y no hacen nada.
(Fuente: Discovery Health, “La niñera”)